en la universidad, sin duda prefería que los exámenes fueran
por la tarde. así tenía toda la mañana para repasar en mi casa, comía y me
marchaba hacia la escuela tranquilamente. cuando eran por la mañana, apenas
había un rato para repasar mientras esperabas a que abrieran el aula donde se
iba a realizar el examen. y eso sin hablar de lo mal que dormías la noche
anterior...
como digo, cuando el examen era por la tarde, por la mañana repasaba. si lo llevaba bien preparado y tenía esperanzas de aprobar, ataba los últimos cabos: memorizaba las fórmulas más usadas, esbozaba mentalmente el planteamiento de los problemas más frecuentes, miraba alguno más rebuscado por si acaso... si lo llevaba mal y me presentaba por probar suerte, me miraba unas cosas y otras de los apuntes sin mucho criterio. presentarte aun sin dominar la materia, tenía la ventaja de familiarizarte con el formato de examen de esa asignatura. pero era un mal trago, al menos para mí.
cuando ahora preparo una clase complicada que voy a dar por la tarde, las sensaciones son parecidas a cuando repasaba para un examen en aquellos años jóvenes: algo de nerviosismo, tendencia a la dispersión mental que trato de evitar, y llegar un momento hacia la hora de comer en el que digo “ya no me entra nada más, que sea lo que tenga que ser”.
si eres estudiante, sólo a ti te afecta cómo hagas un examen, pero cuando eres profesor particular y tienes que enseñar una asignatura a un chico/a de ‘eso’ o bachillerato, la responsabilidad es mayor. en física y química, ahora se dan cosas que no se daban en nuestra época, y uno tiene que ponerse al día. incluso en matemáticas, donde es más difícil que me pillen, en 2º de bachillerato puede haber algún problema rebuscado, para el cual tengo que ir prevenido.
después de hacer un examen, solía ser muy pesimista. luego, si
aprobaba, recordaba lo que había hecho y pensaba “vaya, si es que realmente
no lo hice tan mal después de todo”. mi pesimismo venía de fijarme sólo en los
ejercicios que peor se me habían dado, y no dar importancia a lo que había
hecho bien. cuando había estudiado mucho, había cosas de la asignatura que las
tenía muy interiorizadas, hasta el punto de considerarlas ‘obvias’ por decirlo
así. creía que a la hora de corregir el examen, los profesores darían por sentado que el alumno supiera eso, y apenas lo valorarían. y no era tan así...
de manera similar, puedo salir de una clase preocupado porque en un ejercicio muy difícil de física o de química me han pillado desprevenido. pero luego pienso: “bueno, al fin y al cabo he sabido explicarle a este alumno/a los posibles casos de un sistema de ecuaciones según el rango de la matriz, que para mí es muy obvio, pero para ellos no lo es tanto”. sobre todo teniendo en cuenta que, con la situación actual y las clases semipresenciales, en los colegios e institutos no explican nada...
en fin, los exámenes y otras situaciones análogas imponen respeto. por eso a menudo soñamos con exámenes... tenéis alguna experiencia sobre este tema que queráis compartir? estudiáis mejor por la mañana o por la noche? yo por la noche nunca fui capaz.
De noche, Chema, siempre me fue mejor estudiar de noche y madrugada, pero igual me pasaba como a ti, algo pesimista y pensando en lo que hice mal, al final todo bien, deberíamos confiar más en nosotros.
ResponderEliminarAbrazo
A mí me gustaba más los exámenes por la mañana, porque me levantaba a repasar y lo tenía más masticado todo, que luego por la tarde parece que está una más desconectada.
ResponderEliminarY para estudiar, siempre mejor por la noche, y como te he dicho me gustaba también madrugar para repasar.
Cuando hacía los exámenes siempre me iba derechita a mirar a los libros a ver si lo había respondido igual, pero hasta que no me daban las notas pues no estaba tranquila.
Tú que eres profe no dejarás de estudiar para explicarles los temas a tus alumnos.
Besos.
Me ha gustado recordar mi época de instituto si pudiera ir atrás en el tiempo me gustaría volver...
ResponderEliminarEn el colegio, en el instituto, en la universidad... Con el carnet de conducir, con el certificado de inglés... Los exámenes forman parte de nuestra vida ( pasé los míos los de mi hijo y ahora disfruto ayudando en los de mi nieto aunque haya cambiado mucho desde entonces , eso me obliga a tener que estudiar de nuevo algunas materias que tenía olvidadas ) desde que nacemos hasta casi que nos morimos. Con el tiempo, uno se termina acostumbrando a todo ritual que un examen conlleva, pero el miedo los nervios y la tensión nunca desaparecen. Como siempre estudie en las noches, las mañanas ya te puedes imaginar, pones el despertador y suena pero al mismo tiempo la mano lo apaga. Piensas para que ? Si me lo se perfectamente , luego llega el examen
y con los nervios y la falta de sueño te quedas con la mente en blanco solo recuerdas esa hora que dormiste de mas ..
me acuerdo mucho de mis compañeros del insti de santiago la época de mis mas bonitos recuerdos y alguna vez en mis noches eternas pienso
¿qué habrá sido de ellos ? Ojalá les haya ido bien ¡¡¡¡¡
Goce moito da fin de semana
bicos para Jana
Prefería que los exámenes fueran de mañana y cuanto más temprano mejor. En mi caso me gustaba estudiar por la mañana y por la tarde, me iba pronto a la cama, muy oronto, madrugaba mucho para darle un último repaso, y en cuanto salía del examen inevitble comentar con los compañeros, pero pasaba página para seguir estudiando el siguiente examenn. Desde luego era y soy de preferir a primera hora de la mañana y por supuesto de no trasnochar para estudiar sino dormir y madrugar para darle el último repaso.
ResponderEliminarPero lo que recuerdo con nitidez es el nerviosismo previo a hacer un examen y si este era oral, en la carrera tuve unos ciantos, el nerviosismo se potenciaba, ufffff.
Besos, chema.
Ha de ser estresante, estoy segura, porque los temas los tratas de enseñas, con la expectativa de ser pedagogo y que de verdad aprendan pero luego, claro, cada caso es distrito, y los exámenes son el mismo.
ResponderEliminarUn abrazo. Feliz día
Yo sueño con exåmenes pero nunca me preocuparon demasiado. Un beso
ResponderEliminarEstudiaba de noche, mis hijas una de noche y la otra de dia. (Durante un tiempo tenia que viajar en tren un trayecto de una hora y ahí estudiaba) Yo te pienso un buen profe, hablas mucho de ello y se transmite el interés que pones, imagino que tus alumnos sacan bien los exámenes y si no es así es su culpa. Que disfrutes de un fin de semana amable
ResponderEliminarHola.
ResponderEliminarYo siempre he sido de estudiarpor l mañana. Me sigue pasando, mis jueves reflexivos los escribo bien temprano porqu ea esas horas soy "más personas".
Mis hijos ahora trabajan dando clases en academias(y siguen estudiando)y cuando preparan los ejercicos y temarios para ayudar en los exámenes a sus alumnos "sufren" porque es una gran responsabilidad. Eso sí, cunando sacan buenas notas es muy gratificante.
Me ha encantado conocer tu experiencia.
Feliz finde.
Muy buenos días, sabes una cosa da gusto leerte porque es como estar hablando contigo, te abres tanto que eres un libro abierto y buena persona y eso da gusto hoy día encontrar. Eres un buen profesor de eso no me cabe duda, porque te aplicas en prepararte todas tus clases y tus alumnos tienen que estar muy contentos contigo, porque me da que tienes mano izquierda para ellos. Bueno amigo , un placer saber un poquito más de ti. Besotes para un buen hombre. chaooo hoy estoy de lo más gnerosa ajjaj .
ResponderEliminarSiempre estudiaba de noche. Y prefería hacer los exámenes por la mañana porque si no, hasta que llegaba la tarde estaba muy nerviosa e impaciente, y aún se me hacía más revolico en la cabeza. Y si era oral, ya ni te cuento. Era lo que peor llevaba…
ResponderEliminarHoy en día, me tengo que examinar delante de cinco o seis jueces de otros países, pero, en este caso, no tengo que hablar, bueno, hablo con mi cuerpo, y lo cierto es que los primeros años lo pasaba francamente mal; al final aprendes a fluir sin tener en cuenta a las personas que tienes delante… pero ese nerviecillo interior no te lo quita nadie…
Abrazos y cariños, y muy feliz finde, mi querido Chema 💙
Eres un máquina, Chema. Nunca dudes de tu capacidad. En educación emocional se nos dice que no nos quedemos en un punto negativo porque sinceramente eso no resume un trabajo, es cierto que vemos antes lo negativo que lo positivo y nos quedamos rumiando en ello. Pero, lo dicho, eres un profesor estupendo.
ResponderEliminarPor cierto, yo me levantaba a las cinco o seis de la mañana, me era imposible estudiar de noche.
Mil besitos con cariño y muy feliz finde, solete.
Amiguiño Chemita...
ResponderEliminarYo la verdad es que soy lo contrario...
Quiero hacer el examen lo antes posible.
En fecha, y si es posible a primera hora de la mañana.
Soy muy nerviosa y me crea muchísima ansiedad y estrés.
Por ese motivo, cuanto antes pase... Mejor.
La semana pasado tuve uno que me salió francamente bien y menudo descanso tuve después.
Este Martes tengo otro... XD.
Otra cosa...
Menudo cambio pegaron mis notas desde que me dieron clases de técnicas de estudio.
Me gustó tu post.
Un abrazo desde la Nave IXS ERVER.
💖💖💖
Yo todo lo he preferido siempre por la tarde. Por las mañanas no soy persona. Necesito como mínimo 3 horas para hablar correctamente... jajajaja las mismas que para escribir.
ResponderEliminarYa no me fuerzo. Me dejo estar. 😊 Besos
PD. quizá por eso era tan mala estudiante...
Yo prefería acostarme pronto y madrugar para estudiar. Con café o sin él me quedaba dormida sin remedio.
ResponderEliminarBesos.
mujer de negro, yo alguna vez intenté estudiar después de cenar, pero saqué poco rendimiento. en los primeros años de la carrera era muy pesimista y autoexigente, demasiado...
ResponderEliminarmaría, yo después del examen también contrastaba mis respuestas. en el tablón de anuncios de algunas asignaturas, ponían la resolución del examen. preguntar a otros compañeros que habían hecho el examen contigo, no siempre era fiable. y sí, tienes razón, uno nunca deja de ser estudiante. :)
lua clara, hay situaciones parecidas a un examen, como una entrevista de trabajo. en ese caso puedes repasar mentalmente lo que sabes de la empresa para hacerles la pelota, y las respuestas a las preguntas típicas que hacen. cuánto paripé... 3:) el examen teórico de conducir, no tuve problema, pero en el práctico los nervios me traicionaban. la época del colegio y el instituto es la más entrañable, y toda la vida te acuerdas de tus compañeros y profesores.
prozac, a mí me agobiaba juntarme con mis compañeros antes del examen. siempre había algún agorero que decía: "mira que si ponen un problema de..." (el tema más rebuscado que uno se pudiera imaginar). tú estudiaste derecho, creo recordar, y claro, tendrías exámenes orales. saber expresarse bien, controlar los nervios, usar bien el lenguaje corporal... son cosas que requieren entrenamiento.
besos!!
albada, aunque es mi vocación, no deja de ser un trabajo duro. a veces te entra la inseguridad: "me estaré explicando bien, se me estará entendiendo?". tienes que dominar la materia y saber explicarla...
ResponderEliminarsusana, yo el otro día soñé que me tenía que examinar otra vez de una asignatura de dibujo industrial que se me atravesó y que no sé ni cómo la aprobé en su día...
ester, en cuanto al estudio, hay personas diurnas y nocturnas. sí que me gusta hablar de las clases. a veces en facebook comento alguna anécdota curiosa o divertida que me haya pasado con alguna alumna. las chicas suelen ser más divertidas. :) a ver si este año tod@s mis alumn@s sacan bien el curso.
gemma, yo en época de exámenes, que se suspendían las clases, iba desde la mañana temprano a una biblioteca pública. estaba en la puerta esperando a que abrieran, porque además luego sería difícil coger sitio. sí que se sufre, tienes que dominar mucho la materia para que no te pillen en nada, saber explicar bien, gestionar el tiempo para darlo todo... no es fácil, aunque es gratificante.
besos!!
campirela, gracias por tus bonitas palabras!! :* sí, la verdad es que me gusta contar cosas con las cuales la gente se pueda sentir identificada, y en un estilo de redacción que resulte ameno de leer. o al menos ésa es la intención. :) este año tengo buenos alumn@s, y eso también motiva a enseñarles lo mejor posible, porque sabes que le sacarán provecho.
ResponderEliminarginebra, en los exámenes orales tienes que hablar sin trabarte, venciendo el miedo a quedarte en blanco... no es fácil, no. es verdad que si un examen es por la mañana, te da menos tiempo a ponerte nervioso/a. cuando tienes delante a un tribunal, como al defender el proyecto de fin de carrera, eso sí que intimida. gracias por tu bonito comentario y por compartir tus experiencias!! :*
auroratris, gracias guapa!! :* un profesor de mi colegio decía que había que saber ver los distintos grises que hay entre el blanco y el negro. que cuando crees que lo has hecho mal, en realidad hay cosas que has hecho bien pero que no les has dado importancia. al estudiar de madrugada, tienes la mente más fresca.
besos!!
romaxu, al escribir esta entrada me acordé de ti, porque todavía eres estudiante, eres muy joven. ;) cuando defendí el proyecto de fin de carrera, que en cierto modo es como un examen, al salir el listado de los alumn@s que íbamos a defender con la fecha y la hora aproximada a la que nos tocaba a cada uno, me cabreé porque me tocó de los últimos, jeje. estaba deseando quitármelo de encima... en cuanto a las técnicas de estudio, yo aprendí tardíamente lo útil que es hacerse resúmenes. lo interesante no es el resumen en sí, sino el proceso de hacerlo, porque así se te van quedando las ideas. mucha suerte con los exámenes que te quedan!! :*
ResponderEliminarlaura, yo como estudiante era capaz de lo mejor y de lo peor: aprobar a la primera asignaturas difíciles, o suspender asignaturas marías que todo el mundo aprobaba. menos mal que no soy el único que prefiere los exámenes por la tarde! me estaba sintiendo un poco solo. :D
devoradora, a mí en general siempre me ha costado conciliar el sueño. pero cuando tenía un examen al día siguiente por la mañana, en cuanto cogía los apuntes se me cerraban los ojos, era psicológico. ^_^ sí, mejor acostarse pronto y madrugar.
besos!!
Bueno a mi me gusta la noche
ResponderEliminarpara estudiar, pero le tengo
pánico a los test, me pongo
muy nerviosa, sabes Chema me agrada
mucho como hablas de todo.
Besitos dulces
Siby
Besitos dulces
Siby
Aún sueño con exámenes, unas veces con los exámenes universitarios, y otra con las oposiciones. Es curioso.
ResponderEliminarY sí, tienes razón, con esto de las clases semipresenciales el temario quedará mermado, sobre todo para los alumnos de bachillerato. Suerte tienen tus alumnos de tenerte.
Abrazos y feliz sábado
Te confieso Chema que a mi me gustaba más por la mañana por el hecho de que todo está más fresco... Sin embargo mi hija que tiene turno de tarde en la universidad, muchas veces me ha dicho las mismas cosas que tú nos describes.
ResponderEliminarBesitos y feliz domingo
Uyyyy esas cafeteras nocturnas y con mucha pero que mucha alevosía que bien venían. Tus alumnos tienen un buen profe pero claro tendrán que poner de su parte.
ResponderEliminarBesines utópicos.-
Pues ami se me daba mejor estudiar por la tarde, ni por la noche ni por la mañana.
ResponderEliminarSin embargo si me gustaba el examen a primera hora de la mañana, fluía todo mejor.
Feliz lunes
Un abrazo chema.
Chema,comprendo que tienes que estar al día de todos los conocimientos y avances de tus asignaturas a la hora de explicar a tus alumnos. Estoy segura que das las clases con mucha claridad, como lo haces en cada post...Yo recuerdo que hacía resúmenes y ello me daba seguridad de ideas. Me gustaban los exámenes por la mañana porque estaba más lúcida y aún sigo soñando con clases y exámenes, amigo.
ResponderEliminarMi abrazo y gracias por tu cercanía y la entrega que pones en tus posts.
Hola Chemist! Seguro que tú eres un profe estupendo con la paciencia que tienes y lo mucho que te esfuerzas en aprender cómo enseñarles algo a tus alumnos. Sí que hay que actualizarse y evolucionar en las enseñanzas, claro...
ResponderEliminarYo jamás fui capaz de estudiar de noche, soy una dormilona tremenda. Solo me ponía nerviosa en los exámenes orales, el resto los llevaba muy bien. Mis amigos se quedaban perplejos y me lo decían. Siempre he sido muy tranquila. Mi madre dice que tengo sangre de horchata... cada vez menos.
Besitos
siby, los exámenes tipo test, por un lado los prefiero antes que los exámenes de desarrollar, me cuesta mucho aprenderme temas de memoria. pero por otro lado, las respuestas de un test están bien o están mal, no hay término medio... me alegra que te haya gustado! :)
ResponderEliminarmaite, antes cuando explicaba un tema en el que pudiera tener lagunas, podía decirle al alumn@ "a ver, déjame mirar tus apuntes...", pero ahora no tienen apuntes ni nada. por poco que yo les explique, más de lo que les explican en el instituto ya es.
ani, me gustaba la tarde para los exámenes, pero para ir a clase, a mí no me funcionó bien. no aprovechaba bien las mañanas, en un suspiro llegaba la hora de comer y no había hecho gran cosa. en estas cosas, cada persona es un mundo...
irma, últimamente llevo una racha de buenos alumn@s, pero en el pasado tuve algunos de traca, culpa de sus padres, supongo... un profesor particular te ayuda a entender los conceptos más difíciles, pero luego tienes que poner de tu parte, como bien dices.
besos!!
carmen, yo también prefería las tardes para estudiar. recuerdo tardes en las que di importantes empujones a asignaturas difíciles... yo creo que habré aprobado más o menos la misma proporción de exámenes de mañana que de tarde, pero en principio prefería la tarde...
ResponderEliminarmªjesús, los resúmenes son útiles porque en el proceso de hacerlos te vas aprendiendo el tema, se te van quedando las ideas principales. dicen que la mejor manera de aprender es enseñar, y eso lo compruebo cada día que doy clase. y sí, me gusta contar las cosas de manera sencilla, "de andar por casa". :)
rosana, suerte que tenías, porque un exceso de nervios puede llevarte a arruinar un examen. bueno, "sangre de horchata" yo lo asocio más a falta de carácter, lo tuyo sería más bien flema británica. ;) antes de un examen, a mí lo que me ponía histérico era oír a los agoreros de turno diciendo que en esa convocatoria lo iban a poner muy difícil, o que iba a caer un problema de algún tema raro... ese tipo de cosas.
besos!!
Menuda tortura los exámenes. Me exigían mucho en casa y además era bastante nerviosa y no podía de ansiedad.
ResponderEliminarUn abrazo.
A mí nunca me gustó estudiar. No era problema de los profesores. Pero nunca, jamás, me gustó. De hecho, fue en tercero de EGB cuando empezaron las responsabilidades escolares en serio: deberes, estudio, estudio, estudio. Estudio de cosas que ni me gustaban ni me importaban. Y así hasta hoy y eso que ya peino canas. Madre mía, recuerdo las comeduras de coco y el mantra aquel de "estudia o tu vida será un infierno". Joder, cómo nos engañaron. Nadie nos dijo en realidad cómo funciona la vida. De hecho, ¿quién puede? Pero nos podían haber enseñado todos los caminos, no los que solo interesa al Estado que aprendamos. Menos mal que el tiempo pasa y mi odiosa época escolar y académica quedó atrás.
ResponderEliminarHola Chema.
ResponderEliminar¡Que diferente de una persona a otra! Yo siempre he preferido un examen a primera hora para quitarme la angustia y relajarme el resto del día. Nunca he tenido exámenes a la tarde más allá de los de la academia de inglés, pero sí que había años que los exámenes de la uni eran a la 9 y otros a la 13 y prefería a las 9. Me levantaba a las 6 para repasar y ya. Aunque cuando estudié mi última titulación como era online nos vinieron a hacer los exámenes en dos días y fue un viernes a la tarde (3) y un sábado a la mañana (3). ¡Te puedes imaginar que locura!
Claro que no es lo mismo jugartela tú que con lo que hagas ayudar a jugarsela a tu alumno pero al final la responsabilidad es suya.
Besos
rocío, a mí también me exigían. como al principio de la carrera era muy empollón, a mis padres les acostumbré mal, y cuando en tercero se me empezó a atravesar alguna asignatura, les pareció una catástrofe...
ResponderEliminarcabrónidas, bienvenido! yo en la carrera, aunque la terminé en un número de años dentro de lo razonable, fui de más a menos por falta de motivación. pasaba todo el día estudiando sin tener vida, me sentía cada vez más aislado, y las buenas notas que sacaba no eran muy valoradas por los familiares y el entorno en general...
pirulí, eso sí te lo admito, haces el examen por la mañana, y tanto si te ha salido bien como mal, vas a casa, comes y descansas. dentro de un mismo curso nunca había dos exámenes en un mismo día, pero como muchos estábamos a caballo entre dos cursos, pues sí que podíamos tener un examen por la mañana y otro por la tarde. si dos exámenes en un día ya son muchos, tres tiene que ser una matada!
besos!!