muchos de nosotros consideramos la existencia del estado de israel como algo que no tiene nada de extraordinario ni ha de ser cuestionado.
israel es una civilización antigua en la que supuestamente tuvieron lugar las historias narradas en la biblia. dichas historias tienen su parte de mito y de realidad, pero en cualquier caso forman parte de la cultura.
si otras naciones antiguas como egipto o grecia siguen existiendo como tales -eso sí, con grandes diferencias en su extensión territorial, su cultura, su demografía y su status en el mundo respecto a la antigüedad-, por qué no iba a seguir existiendo israel, la patria de los judíos? es lo que uno podría preguntarse.
pues bien, aunque los que hemos nacido en la segunda mitad del siglo xx -por dar un intervalo de tiempo orientativo- hayamos visto siempre en los libros de geografía y en los mapas que israel tiene un estado propio, durante muchos siglos esto no fue así.
durante la época en que israel se encontraba bajo dominación romana, se produjeron varias revueltas de los judíos contra el poder del imperio establecido en su tierra. en el siglo i d.c. la última de las rebeliones -que dio lugar a una guerra que se extendió entre los años 132 y 135- fue aplastada, destruyendo además jerusalén y obligando a los judíos a huir.
los romanos, tras su victoria, dieron a lo que hasta entonces era la tierra de israel el nombre de palestina. lo cual se podría entender como una venganza, pues los palestinos eran un pueblo enemigo de los judíos.
de ese modo se produjo lo que se denomina la diáspora: los judíos se dispersaron por muy diversos países del mundo, adoptando la lengua y, en mayor o menor medida, la cultura del país en que se instalaban.
a finales del siglo xix surgió una corriente denominada sionismo, que defendía el regreso de los judíos a la antigua tierra de israel. paralelamente y en la misma época, se realizó una labor de recuperación del idioma hebreo, que durante muchos siglos fue una lengua muerta, reservada tan sólo a uso litúrgico -de manera similar a lo que sucede con el latín-.
los judíos dispersos por el mundo, como ya se ha dicho, aprendían la lengua del país que les acogiera, mientras que en la antigua tierra de los judíos, el hebreo se fue sustituyendo por otra lengua semítica, el arameo.
el hebreo se adaptó al mundo moderno, incorporando nuevas palabras, y comenzó a enseñarse de nuevo como lengua materna a las nuevas generaciones. así pues, y esto es algo que puede sorprender a muchos como me sorprendió a mí, el hebreo no siempre ha existido como lengua viva, sino que tuvo un largo paréntesis de extinción.
ya en el siglo xx, el muy lamentable suceso del holocausto, en la época de hitler, obligó a muchos judíos a huir a su antigua tierra, con lo que la corriente sionista cobró fuerza.
en el año 1947, poco después de finalizar la 2ª guerra mundial, y ante la emigración masiva de judíos a lo que entonces era palestina, la organización de las naciones unidas propuso la partición de este territorio en dos estados: uno judío y otro árabe. pese a las amenazas de la liga árabe, que estaba en contra de la distribución territorial asignada por la o.n.u., el 14 de mayo de 1948 finalmente se proclamó el estado de israel.
nada más dictar la o.n.u. su resolución, el nuevo estado de israel fue invadido por sus vecinos árabes, provocando una guerra que venció israel, ampliando además su territorio respecto al que en principio le había sido asignado.
desde entonces israel ha tenido numerosos conflictos bélicos con sus vecinos árabes, especialmente en las fronteras de su territorio. a pesar de todo, es un país con un alto nivel de vida y un sistema de gobierno democrático. su capital es jerusalén, que sigue siendo lugar de peregrinación para muchos cristianos, y su ciudad de mayor actividad económica y comercial es la moderna tel aviv.
israel es el único estado judío del mundo. es lo que se ha denominado el ‘hogar nacional judío’. se trata de un estado muy moderno que, como dije al principio, nosotros siempre lo hemos conocido así y no nos resulta nada novedoso. pero en su momento, la creación del estado de israel fue sin duda un gran acontecimiento histórico.
israel es una civilización antigua en la que supuestamente tuvieron lugar las historias narradas en la biblia. dichas historias tienen su parte de mito y de realidad, pero en cualquier caso forman parte de la cultura.
si otras naciones antiguas como egipto o grecia siguen existiendo como tales -eso sí, con grandes diferencias en su extensión territorial, su cultura, su demografía y su status en el mundo respecto a la antigüedad-, por qué no iba a seguir existiendo israel, la patria de los judíos? es lo que uno podría preguntarse.
pues bien, aunque los que hemos nacido en la segunda mitad del siglo xx -por dar un intervalo de tiempo orientativo- hayamos visto siempre en los libros de geografía y en los mapas que israel tiene un estado propio, durante muchos siglos esto no fue así.
durante la época en que israel se encontraba bajo dominación romana, se produjeron varias revueltas de los judíos contra el poder del imperio establecido en su tierra. en el siglo i d.c. la última de las rebeliones -que dio lugar a una guerra que se extendió entre los años 132 y 135- fue aplastada, destruyendo además jerusalén y obligando a los judíos a huir.
los romanos, tras su victoria, dieron a lo que hasta entonces era la tierra de israel el nombre de palestina. lo cual se podría entender como una venganza, pues los palestinos eran un pueblo enemigo de los judíos.
de ese modo se produjo lo que se denomina la diáspora: los judíos se dispersaron por muy diversos países del mundo, adoptando la lengua y, en mayor o menor medida, la cultura del país en que se instalaban.
a finales del siglo xix surgió una corriente denominada sionismo, que defendía el regreso de los judíos a la antigua tierra de israel. paralelamente y en la misma época, se realizó una labor de recuperación del idioma hebreo, que durante muchos siglos fue una lengua muerta, reservada tan sólo a uso litúrgico -de manera similar a lo que sucede con el latín-.
los judíos dispersos por el mundo, como ya se ha dicho, aprendían la lengua del país que les acogiera, mientras que en la antigua tierra de los judíos, el hebreo se fue sustituyendo por otra lengua semítica, el arameo.
el hebreo se adaptó al mundo moderno, incorporando nuevas palabras, y comenzó a enseñarse de nuevo como lengua materna a las nuevas generaciones. así pues, y esto es algo que puede sorprender a muchos como me sorprendió a mí, el hebreo no siempre ha existido como lengua viva, sino que tuvo un largo paréntesis de extinción.
ya en el siglo xx, el muy lamentable suceso del holocausto, en la época de hitler, obligó a muchos judíos a huir a su antigua tierra, con lo que la corriente sionista cobró fuerza.
en el año 1947, poco después de finalizar la 2ª guerra mundial, y ante la emigración masiva de judíos a lo que entonces era palestina, la organización de las naciones unidas propuso la partición de este territorio en dos estados: uno judío y otro árabe. pese a las amenazas de la liga árabe, que estaba en contra de la distribución territorial asignada por la o.n.u., el 14 de mayo de 1948 finalmente se proclamó el estado de israel.
nada más dictar la o.n.u. su resolución, el nuevo estado de israel fue invadido por sus vecinos árabes, provocando una guerra que venció israel, ampliando además su territorio respecto al que en principio le había sido asignado.
desde entonces israel ha tenido numerosos conflictos bélicos con sus vecinos árabes, especialmente en las fronteras de su territorio. a pesar de todo, es un país con un alto nivel de vida y un sistema de gobierno democrático. su capital es jerusalén, que sigue siendo lugar de peregrinación para muchos cristianos, y su ciudad de mayor actividad económica y comercial es la moderna tel aviv.
israel es el único estado judío del mundo. es lo que se ha denominado el ‘hogar nacional judío’. se trata de un estado muy moderno que, como dije al principio, nosotros siempre lo hemos conocido así y no nos resulta nada novedoso. pero en su momento, la creación del estado de israel fue sin duda un gran acontecimiento histórico.