miércoles, 27 de septiembre de 2023

conservación

 

hoy en una pastelería a la que voy habitualmente, una de las dependientas, que es de georgia, me ha preguntado cómo se llama en español cierto principio físico. por lo que me ha explicado, he entendido que se refería al principio de conservación de la materia, que dice así: la materia ni se crea ni se destruye, se transforma.

me ha contado que es ingeniera química, y que a veces sus nietos le preguntan dudas. cuando le he dicho lo del ‘principio de conservación de la materia’, ella lo ha anotado en un papel con perfecta ortografía. al parecer, en ruso o en georgiano -desconozco en qué idioma estudiaban allí en aquella época-, esa ley física se llama de una manera que, traducida literalmente al español, resulta un poco abstracta y críptica. ella me lo ha intentado decir, pero no me he enterado muy bien.

otra cosa no, pero de la antigua unión soviética salieron muchos grandes científicos/as.

el ajuste de una reacción química se basa en la conservación de la materia. tanto en los reactivos como en los productos, debe haber el mismo número de átomos de cada elemento que interviene. como ejemplo he elegido la combustión de la glucosa, ya que la anécdota que he contado ha sucedido en una pastelería. ^_^

los experimentos de alquimia que se realizaban en la edad media, seguramente se basaban en reacciones más complejas. dentro de los personajes malvados en los cómics, gargamel quizá es uno de los que me resultan más llevaderos, entre otras cosas por su escasa peligrosidad. alguien que no se entera de que su casa está llena de pitufos vigilándole, en el fondo da más pena que otra cosa. :P

y volviendo a la pastelería de mi amiga georgiana, me pregunto cómo se podría aplicar el principio de conservación de la materia al merengue y al bollo de mantequilla...

jueves, 21 de septiembre de 2023

ondas cerebrales

nuestras neuronas se comunican entre sí a través de impulsos eléctricos. esto genera un flujo eléctrico que se manifiesta en forma de ondas cerebrales. dichas ondas se clasifican según su frecuencia, que aumentará con el grado de actividad del cerebro en cada momento.

empezaremos desde la mayor ‘agitación’ neuronal por decirlo así, en orden decreciente hasta el sueño profundo.

 

ondas hibeta (f > 30 Hz)

se producen como respuesta a una situación de peligro o de emergencia. nos generan estrés, en el sentido positivo del término, ya que sin él no reaccionaríamos a las situaciones apremiantes.

ondas beta (12 Hz < f < 30 Hz)

se asocian a estados de intensa concentración en una actividad, por ejemplo cuando estamos estudiando o haciendo algún trabajo delicado.

esther necesita poner toda su atención al escribir a máquina, aunque su técnica mecanográfica aún no esté muy depurada. ;)

ondas alpha (8 Hz < f < 12 Hz)

se corresponden con estados de relajación, tras una intensa actividad física o mental. ciertos entornos, como por ejemplo un bosque, generan paz y favorecen la aparición de estas ondas.

ondas theta (3,5 Hz < f < 8 Hz)

aparecen en estados de calma profunda, de mayor relajación que en el caso anterior. se asocian también al estado de transición antes de quedarnos dormidos.

a nuestra amiga esther, no hay quien le quite la costumbre de chuparse el dedo. ^_^

ondas delta (1 Hz < f < 3,5 Hz)

aquí ya nos encontramos en la máxima calma posible, en el sueño propiamente dicho. se supone que siempre soñamos mientras dormimos, otra cuestión es que luego nos acordemos o no...



a mi modo de ver, lo que más nos atrae de una persona es su mente. y por lo que parece, lo que hay el interior de la mente en gran medida son ondas...

una vez más, os recomiendo el libro ‘sorprende a tu mente’ de ana ibáñez. :) 

jueves, 14 de septiembre de 2023

trapecio

 

ya sabéis, el trapecio es una barra horizontal sujeta por dos cuerdas en ambos extremos, que los equilibristas usan para balancearse y darse impulso, y de ese modo realizar sus números gimnásticos.

el trapecio es también un músculo que se encuentra entre el hombro y el cuello. ciertos ejercicios físicos sirven para fortalecer los trapecios.

sin embargo, por ahora vamos a hablar del trapecio como figura geométrica. de pequeño yo veía el circo de la tele -como todos los niños y niñas de la generación egb-, por lo que había aprendido con anterioridad el concepto de trapecio circense. no sé qué llegó a sorprenderme más, si esto o lo de la curva llamada parábola. :P

el caso es que un trapecio es un cuadrilátero en el cual dos de los lados son paralelos entre sí, mientras que los otros dos no lo son. tal vez recordéis la fórmula para calcular su área: “base mayor más base menor entre dos, por altura”.

esta fórmula se puede demostrar. la clave es considerar el trapecio como un triángulo truncado, un triángulo que cortamos por una línea paralela a su base. prolongando los dos lados ‘no paralelos’, reconstruimos el triángulo original del cual proviene nuestro trapecio.

el área del trapecio será igual a la diferencia entre las áreas del ‘triángulo grande’ y del ‘triángulo pequeño’ que le quitamos. el área de un triángulo es igual a su base por su altura entre dos. la altura del triángulo pequeño a priori no la tenemos, por lo que previamente haremos unos cálculos para relacionarla con la altura del trapecio, que sí es un dato conocido.

y así queda demostrada nuestra fórmula: el área del trapecio es igual a la media aritmética de sus bases mayor y menor, por su altura.


parece que mortadelo no se maneja demasiado bien con el trapecio... y en realidad no le culpo, creo que yo lo haría más o menos por el estilo. ;)

miércoles, 6 de septiembre de 2023

habilidades

 

se supone que todos tenemos un don, una habilidad única que nos diferencia del resto. en la novela autobiográfica ‘gozo’ de azahara alonso, me llamó la atención este bonito párrafo:

Hablaba antes del don. De niñas, en el colegio, nos preguntaron cuál era el nuestro. Una compañera dijo que tenía el don de lanzar triples en baloncesto. Otro, el de resolver ecuaciones. Yo, que no tenía ninguno, intento responder todavía (¿puede ser eso precisamente, el don de no tener don?, ¿el don de tergiversar las respuestas?). Está, como decía, el de la reincidencia, pero hay uno más. No se trata de una destreza sino de una carencia: el irrenunciable deseo de estar en otra parte.

cuál es vuestro don? el mío, como no sea descomponer números en factores primos mentalmente... :P

espero descubrirlo antes del fin de 2024, para el cual ya tengo preparado el calendario con imágenes de esther y su mundo que hago obstinadamente año tras año. espero que os guste. ;)