sábado, 26 de julio de 2014

traumas no superados

llevaba mucho tiempo con la idea de escribir esta entrada. como veréis, va medio en broma, medio en serio. son cosas tontas, pero cada vez que las recuerdo pienso: qué pena! ;)


- me fascinaba la física de cou, y pensaba que la de 1º de carrera sería una continuación... pero no, era otra cosa que no tenía nada que ver.

- casi todos los grupos musicales que me gustaban cuando era adolescente, sacaron discos decepcionantes y/o se separaron después de descubrirles.

- un amigo íntimo mío se hizo numerario del opus dei, y nunca volvió a ser el mismo.

- no recuerdo los apellidos de una chica con la que coincidí en 2º de carrera y se fue de la escuela, con lo cual es imposible encontrarla en facebook.

- han cerrado varias librerías en las que entraba siempre: crisol, abac, una sucursal pequeñita de la casa del libro...

- no les hicimos fotos a la cocina y a los cuartos de baño de nuestra casa antes de reformarlos, para poder recordar cómo eran antes.

- dejaron de fabricar los ‘gitanitos’ de ortiz, unos pastelitos que vendían en las panaderías. ahora los venden en los supermercados en paquetes de varias unidades, pero no tienen nada que ver con los de antes.


si se me ocurre alguno más, editaré la entrada y lo añadiré. y vosotr@s? cuáles son vuestros particulares “traumas”? ;)

sábado, 19 de julio de 2014

bajando...

me gusta ver paso a paso las transiciones entre los diferentes barrios de madrid. las rondas (ronda de atocha, ronda de valencia, ronda de toledo y ronda de segovia, que venían en el monopoly) separan los distritos centro y arganzuela, y el río manzanares separa arganzuela y carabanchel.

hace unas tres semanas hice un recorrido partiendo de la plaza mayor. sí, donde puedes tomarte una ‘relaxing cup of café con leche’, la misma.


desde el arco que se ve al fondo en la foto anterior, tomamos la calle de toledo...



me encanta esta zona, es muy pintoresca...





llegamos a un punto estratégico, la puerta de toledo. de aquí para abajo ya es arganzuela.




esto es la glorieta de pirámides. el manzanares ya está al alcance de la vista.


el puente de toledo. es bonito, verdad?



qué menos que una foto del río desde cada lado...



y una vez que hemos cruzado el puente, ya estamos en carabanchel. este barrio también tiene su historia, y deberá ser contada en otra ocasión.

sábado, 12 de julio de 2014

péndulo

por fin se están reeditando las aventuras de johan y pirluit, personajes medievales del mismo autor de los pitufos. de eso tengo que hablar despacio otro día...

hay una escena en la que el joven pirluit está a punto de ser ahorcado -cosa que finalmente no sucede, como podéis imaginar-. en el último momento, sin nada que perder, consigue zafarse de su verdugo, subir por la escalera y descolgarse por su propio peso, para entrar por una ventana del castillo y refugiarse allí.


esta situación, en física se corresponde con el problema del péndulo. para calcular la velocidad de la masa oscilante cuando la cuerda forma un determinado ángulo con un eje que hayamos fijado -elegimos el vertical-, aplicamos el principio de conservación de la energía.

suponemos que dejamos caer la masa cuando la cuerda está horizontal. en ese momento la velocidad es nula y por tanto la energía cinética también lo será, mientras que la energía potencial será máxima. en cualquier otro punto, existirá una energía cinética y una energía potencial que dependerá del ángulo, cuya suma será igual a la energía inicial. igualamos ambas expresiones y obtenemos la velocidad.


como vemos, la velocidad instantánea depende de la gravedad y del ángulo, pero no de la masa. si el cuerpo oscilante se desengancha en un momento determinado, por el principio de inercia continuará con la velocidad que llevara en ese instante.

a partir del momento en que el cuerpo continúa libremente, seguirá una trayectoria en parábola. sabiendo que ahora la única fuerza que existe es la gravedad -vertical hacia abajo-, y fijando el origen de coordenadas en el punto fijo del péndulo, obtenemos las ecuaciones del movimiento.


la velocidad inicial depende a su vez del ángulo en el momento de descolgarse, por lo que las ecuaciones de la trayectoria desarrolladas tomarán esta forma:


para que pirluit pueda alcanzar la ventana del castillo, tiene que elegir bien el ángulo desde el cual se suelte. deben cumplirse dos objetivos: la componente horizontal de la velocidad debe tener un valor suficiente para poder salvar la distancia hasta el castillo; y la componente vertical de la velocidad debe ser la justa para que caiga a la altura de la ventana, ni más arriba ni más abajo.

y al final lo consigue... por poco, pero eso no le quita mérito, ya que se trataba de una acrobacia muy complicada.

sábado, 5 de julio de 2014

diario rojo


este libro lo pedí al círculo de lectores hace mucho tiempo, pero lo había tenido en espera. por fin me he animado a leerlo.

la protagonista, carlota, es una adolescente que vive sus primeras historias románticas con otros chicos. dado que tiene muchas dudas respecto a la sexualidad, decide comenzar un diario en el que va anotando sus experiencias, así como toda la información que va recopilando.

carlota vive lo que podríamos llamar un doble romance con su novio holandés y con un chico al que conoce fortuitamente, a quien llama de manera cariñosa ‘flanagan’ por sus dotes detectivescas. estos dos chicos, así como los familiares y compañeros de clase de carlota, forman parte de su universo adolescente.

para aclarar sus dudas, la protagonista consulta a otras personas con mayor experiencia que ella. asimismo, en su colegio también dedican un tiempo a instruir a los alumnos en estas cuestiones. los resúmenes que realiza carlota están impresos en un tipo de letra diferente, ya que se trata de consejos de gran importancia para los lectores más jóvenes de esta novela.

en realidad, el diario rojo de carlota forma parte de una saga en la cual cada volumen desarrolla un aspecto distinto de la vida de esta entrañable adolescente. sin embargo, se puede leer independientemente.

me ha parecido un libro muy recomendable. para los más jóvenes es instructivo, y para los que no lo somos tanto es una bonita historia, no exenta de interesantes reflexiones.